viernes, 5 de octubre de 2012

Venas garrapiñadas

Ultimamente estoy un poco... ¿apática? No se me ocurre ningún adjetivo mejor. Quizá es que con tanta "tourné" por los hospitales, mi estado anímico, no está pasando por su mejor momento. En fín...que las horas en las salas de espera, mientras hacen pruebas, viajes, etc, dan para mucho, y yo me he puesto a hacer limpieza en mi carpeta de entrada de una de mis direcciones de correo.

Ya, ya sé que ésto, no es interesante en absoluto y estáis pensando que por qué c**ones posteo . ¡Ay Dios mío! Si es que sois muy impacientes... TRANQUILOS, co*o, que todo tiene su explicación. A lo que vamos que pierdo.

He encontrado un mail del año ... bueno, de hace unos añitos, que me ha hecho sonreir... , y reir. Voy a postearlo.Por algún rincón de mi habitación, tiene que estar la carta en papel, pero scanearla y publicarla, me parece una falta de respeto. Así que como "el galán" me hizo llegar su mensaje por mail y carta, hago un copy and paste, que es más rápido (sí, me lo escribió en color rosita, para que fuera más pasteloso aún. ¡Hay que joderse con los gallitos de corral! Luego se quedan en ná.¿Este chico no pensó que podría acabar con su reputación? No, no lo pensó. Siempre ha sido bastante dudosa.).

Os pregunto, ¿eso es romanticismo o es gilipollez?  Es tan, tan azucaroso, que se te garrapiñan las venas, ¿o no? Bueno no... la verdad que es tan,tan,tan... que parece mentira. Os lo posteo y me decís, ¿ok?

¡Ah! Y podéis preguntar hasta la saciedad quién es el autor de semenjantes estupideces, pero no lo dije en su momento, y no lo voy a decir ahora (salvo a honradas excepciones que saben quién es semejante personaje).

Here we go, folks:

Una carta para mi eterno amor

No sé como empezar. No se como trazar la curva letra en el papel. No se cómo decirte que sé que me equivoqué. Lo entiendo, te he fallado, jamás me perdonaré. Sé que tú ya no me amas. Sé que no te volveré a ver. Sé que esos besos que me dabas son hoy cosa del ayer. Se que he perdido todo cuanto en ésta vida anhelaba. Las noches en las que con juegos inocentes me camelabas.

Aún en mí estás presente. Y no puedo seguir así, necesito abrazarte, juntos, otra vez, sí... me abrazo a mi locura al no encontrarte. Quisiera tanto poder de nuevo que te AMO jurarte... pero no serviría de nada, creerías que trato de engañarte. Los errores en la vida se pagan a alto precio. Ahora lo único que siento por mi es desprecio. Me pregunto cada día como fuí tan estúpido de dejarte marchar. solo atiendo a la voz que pregona en mis sueños horrores.

Sólo sé que no sé porque no supe reaccionar. Porque no acepté que sin tí no podría a éste juego jugar. La vida, un juego de crueldad. Te sonríe engalanada de amor y felicidad, y cuando se desnuda, sólo queda falsedad. Pero acepto que toda culpa fué de mi ingenuidad. De el miedo a necesitarte tanto que pudiese morir. Y ya me ves, triste, rodeado de sombras y soledad...

Y lo que más deseo ahora es que puedas leer la carta que escribo. Que sepas amor, cariño mío, que te amo, te quiero, y te necesito. Que no es vivida mi vida si no eres tú de sus versos la poesía. Que son tus ojos los que la hacen palpitar agonías. Que eres tú la sangre que recorre mis venas casi extintas. Que es tuya la única imagen que de mi no exilia.

¿No entiendes, mi amor, que es éste mi último adiós?

. . . . .

Para mi ya todo acabó... ¿qué queda de mi vida si no es tu amor?. Tan sólo quiero pedirte perdón. Jurarte que desde el infierno por tí velaré yo. Que la pluma que mi vida entera te contó en versos de ensueños y amor, también te la regalo yo. Así como todo, todo mi calor, en la lejanía, aún mi corazón te brindó.

No quiero pensarlo dos veces más. No quiero volver con está idea a vacilar. Es la última, la definitiva, de verdad. ¿Para qué voy a quedarme cómo alma en pena en éste horrible lugar?... sé que en algún lugar alguien aún me espera, sé que el cielo u el infierno me habran de acoger, y aunque no lo hagan, a tu lado estaré. Desde el Limbo o el Olimpo, si esque existen tales sitios, te aguardaré yo.

Perdona ésta ortografía. Perdona porque mi llanto mis hojas y la letra enturbió. Perdona si ahora de sangre la puedo manchar yo. Perdona, todo lo que ocurrió ente ambos dos. Perdóname por cruzar mi mirada con la tuya. Perdóname por robar tus mil besos de miel. Perdóname por hacer que supieran a amarga a hiel. Perdóname si no supe apreciar la dulzura de tu blanca tu tez. ¡PERDÓNAME AMOR MÍO SI JAMÁS TE APRECIÉ!

" Lo Siento, Siempre Te He Amado "

2 comentarios:

  1. Dios santo...si a mi me llamas moñas...a éste había que pegarle fuego. Yo confieso que soy un pasteloso pero no con rimas y éstas mierdas, yo soy pasteloso contundente. Ya puestos, yo también quiero dedicarte un poema
    Yin yin juega al futbolín, y So so dice que no!! Anaar juega al billar...y rompe el tapete por no mirar (es de loca academia de pollicía, el mérito no es mío)

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  2. Por cierto, mi comentario ha sido después de tirarme por la ventana tras leer la carta. Acabo de volver a subir a casa y lo he escrito

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